Es diseñadora industrial de formación, pero el destino la llevó a la TV. Ahora quiere demostrar que su talento es lo que la ha puesto en ese lugar
Salvador Franco / Función en Excélsior
Guapa, sensual y espontánea. Así podríamos definir a Verónica Pliego, diseñadora industrial de formación y conductora del programa Al extremo, de TV Azteca.
Lo curioso es que hace poco más de dos años, Verónica no se imaginaba que se dedicaría al mundo del entretenimiento, mucho menos que se convertiría en la portada de H, la revista para caballeros en la que luce sus curvas.
Mientras cursaba una maestría en diseño del producto, en Italia, Pliego recibió una oferta para trabajar en un despacho de moda en Milán, tras lo cual surgió, casi por accidente, una oportunidad para realizar el diseño de imagen del talento de un programa matutino en Monterrey.
“Ahí me pidieron que condujera una sección de moda, pero a mí no me gustaba para nada la TV. ¡Lo veía hasta chafa! Pero no perdía nada, así es que entré y, justo en ese momento, faltó una conductora de espectáculos y me mandaron a conducir. Ahí me enamoré de esta profesión”, recuerda Verónica.
“Me encanta la conducción, me fascina porque puedes ser tú y la gente te puede ver tal y cómo eres. Yo soy una persona súper transparente y la televisión se debe hacer con lo que tú eres.”
A pesar de ser prima del empresario mexicano Ricardo Salinas Pliego y de que el padre de la conductora también se dedica a la televisión, ella jamás sintió curiosidad por explorar ese mundo.
“La televisión no me gustaba a pesar de que mi papá me insistía que la conociera, y yo no quería, pero cuando la probé me encantó y tomé la decisión de no regresar a Europa y dedicarme a esto”, detalla.
Entre las cosas que más disfruta de su nueva carrera destaca la oportunidad de entretener al espectador, algo “que me hace sentir viva y plena”.
Esa misma distracción Verónica la ofrecerá este mes en las páginas centrales de dicha revista, para la que realizó una atrevida sesión fotográfica en la que se despojó “casi” de toda la ropa.
“Jamás pensé que me fueran a hablar, porque voy empezando y no pensé que fuera a ser llamativa para ellos. “Cuando me hicieron la oferta, dije: ¿por qué no?”, expresa.
La única duda que tuvo fue lo que pensarían en su casa. “Me preocupó toda mi familia, pero ya tengo edad para tomar mis decisiones y llevar mi carrera artística, además de que no estoy haciendo nada malo.
“No me puedo detener a dejar de hacer cosas que a ellos no les puedan gustar. No puedo darle gusto a toda la gente”, precisó Pliego, quien aseguró que en la publicación sale en lencería y que jamás se desnudaría por completo.
Ahora su gran reto es demostrar que ha conseguido lo que tiene gracias a su talento y no por ser prima del presidente de Grupo Salinas.
“Me ha costado y me cuesta mucho trabajo demostrar que estoy donde estoy por mi talento.
“La gente cree que para mí fue más fácil, pero la verdad es que no. Tomé la oportunidad que se me presentó y ahora estoy rascándole como todo el mundo, echándole ganas para escalar y crecer profesionalmente.”
Un rostro y cuerpo que muchos espectadores no se cansarán de observar en la pantalla chica.
“Me gustaría también hablar de deportes. Desde que tengo seis años practico equitación y es algo que me desconecta.”
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